Cuenca, Ecuador — 2025 — Hatz se ha asociado con Austrodrill para expandir su presencia en el sector minero de Ecuador, llevando tecnología avanzada de motores alemanes al difícil terreno del país. Esta colaboración resalta un compromiso compartido con la innovación, la calidad y la sostenibilidad.
Desde su entrada en el mercado industrial de Ecuador en 2006 a través de Hydrapne, Hatz ha sido un nombre de confianza en soluciones de motores. Ahora, con la experiencia técnica de Austrodrill, la empresa ha introducido con éxito sus motores 4H50 TI en la industria minera, alimentando las perforadoras de diamante de Rockexplore S.A.S. Estos motores ofrecen una excepcional densidad de potencia, eficiencia de combustible y fiabilidad, incluso en condiciones extremas entre 3,000 y 4,500 metros sobre el nivel del mar.
Eficiencia, Fiabilidad y Rendimiento
La integración de los motores Hatz 4H50 TI ha optimizado las operaciones de perforación de Rockexplore al reducir el consumo de combustible en hasta un 40%, aumentar el tiempo de funcionamiento en un 50%, reducir los costos de mantenimiento en un 40% según el CEO Jhonatan Muñoz, y disminuir las emisiones y niveles de ruido. Estos beneficios han mejorado la seguridad de los trabajadores, reducido el impacto ambiental y aumentado significativamente el tiempo de actividad operativa.
Resultados Récord
La adopción de la tecnología Hatz por parte de Rockexplore permitió a la empresa lograr un nuevo récord nacional en perforación de HQ, superando el anterior umbral sudamericano por 70 centímetros. Este hito refleja tanto la durabilidad de los motores Hatz como la dedicación de Rockexplore a la excelencia técnica.
Impulsados por la Visión y la Sostenibilidad
Dirigida por el CEO Jhonatan Muñoz, Rockexplore eligió Hatz después de una extensa evaluación de alternativas de motores. La decisión se basó en la reputación de Hatz por su integridad en la ingeniería, su rendimiento ambiental y la optimización de la potencia. El sistema de monitoreo digital de la empresa mejora aún más el mantenimiento preventivo, ampliando los intervalos de servicio a 400 horas de operación y reduciendo el mantenimiento correctivo a solo dos intervenciones por año.
